lunes, 26 de junio de 2017

Hoy viene a tomar el té... Regino Mateo Pardo

1.- ¿Por qué te gusta leer?
Es una pasión tan temprana y tan intensa que a estas alturas me costaría encontrar un motivo específico. Cuando leo viajo, sueño, vivo historias que nunca podré experimentar pero que de pronto también se convierten en la mía. Supongo que sobre todo es esa la sensación y por eso la adicción, porque de alguna manera desaparezco entre las páginas, me escapo del tiempo y crezco hacia mi propio interior.

2.- ¿Recuerdas cuál fue el primer libro que leíste?
Resulta un poco complicado, aunque sí hay libros que se han quedado fijados como especiales. Entre esos “primeros” libros está Astérix y Cleopatra, con el que abro mi enamoramiento de los personajes entrañables de Goscinny y Uderzo. He reencontrado recientemente en la casa de mis padres dos versiones ilustradas bellísimas (y adaptadísimas) del Poema del Cid y del Cantar de Roland que devoré en su momento. Por alguna razón, como libro-libro, siempre pienso en una edición especial, también ilustrada, de Platero y Yo que trajeron los Reyes Magos a mi nombre de parte de mi abuela Rosalina como mi primer libro, más que como libro leído como libro en propiedad, pero en todo caso las dos serían apreciaciones falsas. Por casa andaban también recopilaciones de los míticos “Cuentos” de Calleja, que también fueron cayendo muy pronto uno detrás de otro.

3.- ¿Cuál es tu libro favorito?
Si como libro favorito entiendo ese al que necesito regresar cada cierto tiempo, Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar, y El señor de los anillos, de Tolkien son los libros más desgastados, en el caso del “Adriano”, más que desgastado está en ruinas. El Quijote puede sonar tópico, pero es otra referencia que nunca falla y que te llama cada tanto, y como poeta necesito recordar a Cernuda, el Libro de las Alucinaciones de José Hierro o la estadounidense Adrienne Rich.

4.- ¿Y tu momento favorito para leer?
Si tengo que buscar el momento mágico, por la noche, tarde, a partir de las once o de la medianoche, con algo de música barroca muy suavecito de fondo. Ese paisaje –casi imposible con mi actual ritmo de trabajo y de compromisos- por sí solo hace que la experiencia lectora tienda hacia la magia.

5.- Descríbenos tu rincón de lectura.
Algún día tendré una butaca de orejas muy cómoda, con una chimenea a medio fuelle cerca y un par de perros tumbados delante. Mientras tanto, paso tanto tiempo en los transportes públicos y tan poco tiempo en casa que mi rincón real de lectura hoy es un vagón de cercanías, un autobús urbano o, directamente, las calles de Santander mientras voy de camino a alguna parte. En casa ya leo más bien poco.

6.- ¿Nos recomiendas un libro infantil?
Cuando Hitler robó el conejo rosa, de Judith Kerr fue una propuesta que me enamoró, la memoria de una pequeña judía que nos cuenta cómo su familia escapa de Alemania a tiempo y sus experiencias al llegar primero a Suiza y luego a Gran Bretaña. La historia interminable de Michael Ende me deslumbró y me obligó a leerla de un tirón, y los recopilatorios de cuentos de Andersen, Grimm, Calleja y Perrault son nuestro imaginario literario, sin ellos va a resultarnos complicado encontrar nuevos buenos lectores.



Biobibliografía
 
Santander, 1965, aunque criado en Reinosa, cerca de las montañas y del frío. Licenciado en Derecho porque la tradición familiar anda siempre de broma, filólogo en proceso porque nunca renuncié a que ese fuera mi título académico, y pianista con los dedos un poco atrofiados ya por falta de uso. Me he pasado la vida entre libros, música, perros, amigos y guerras variopintas de carácter social unas y político otras. Hoy me definiría como “agitador cultural” más que como gestor, y trabajo en el departamento de programación del Palacio de Festivales de Cantabria, además de impartir algunas clases de literatura, coordinar un par de clubes de lectura, perderme por las redes sociales y recordar de vez en cuando que están muy abandonados después de haber sido muy activos mi blog y el de mi perra Gin.
También me gusta definirme como poeta, pero quizás sea una palabra demasiado ambiciosa y tendría que limitarme a decir que escribo y publico poesía, además de aventurarme en tiempos recientes en la novela, el cuento y el teatro por ver si me gano con ellos la mitad de las satisfacciones al menos que me han dado los versos. El último libro pubicado fue La mirada caliza y anda por la imprenta queriendo ver ya la luz 33 Instantáneas.





lunes, 19 de junio de 2017

Hoy vienen a tomar el té... Las Microlocas


1.- ¿Por qué os gusta leer?
Eva Díaz Riobello: Soy una adicta a las historias, desde que me contaban cuentos antes de dormir cuando era pequeña, para mí leer es tan imprescindible como respirar o comer. Si no tengo un libro a mano, me las invento yo. Leer es una forma de viajar y evadirse que a mí personalmente me ayuda a afrontar la realidad y comprenderla mejor. 
Isabel Wageman: Básicamente, la razón es el placer, como en casi todo lo que nos gusta. Me gusta leer por divertirme, emocionarme y ojalá, sorprenderme. Me gusta leer porque ser escritora es ser lectora.
Teresa Serván: Porque soy curiosa. Porque no puedo evitar observar a la gente que no conozco. Escuchar conversaciones ajenas. Espiar otras vidas.
2.- ¿Recordáis cuál fue el primer libro que leísteis?
EDR: Uno de los primeros que recuerdo es El fantasma de palacio, de Mira Lobe, de la colección blanca de Barco de Vapor. Lo releía mucho porque me gustaba mucho la historia, las ilustraciones, y además podía dibujar encima. Lo tenía todo.
TS: Son muchos primeros libros. El primero que te leyeron, el primero que leíste sin conciencia, el primero que elegiste, el primero que leíste a escondidas, el primero que no terminaste, el primero que no te gustó.
IW: ¿Y si hay más primeros? ¿Cuáles son los primeros que nos pueden faltar?
3.- ¿Cuál es vuestro libro favorito?
EDR: No podría elegir uno solo ni aunque me apuntasen con una pistola. Cada año descubro libros que me entusiasman y los recomiendo a todo el mundo. Los últimos que me han encantado son Las cosas que perdimos en el fuego, de Mariana Enríquez, y Patria, de Fernando Aramburu. Y dos que recomiendo siempre son Jonathan Strange y el señor Norrell, de Susanna Clarke y Música para camaleones, de Truman Capote.
IW: ¿Mi libro favorito de cuando era niña? ¿Mi libro favorito de hace diez años? ¿Mi libro favorito ahora? Nuestros libros favoritos cambian con el tiempo. Y con suerte, mañana tendré otro libro favorito. Qué difícil dar títulos sin ser, al mismo tiempo, franca y falsa.
TS: No soy de favoritos, ni película, ni serie, ni canción. Hay libros importantes en momentos vitales. Libros dolorosos en momentos frágiles. Libros radiantes, influyentes, poderosos. Libros que si hubiera leído en otro momento no habrían dolido, influido o brillado tanto.
4.- ¿Y vuestro momento favorito para leer?
EDR: Durante el día aprovecho todos los momentos que puedo, especialmente cuando voy y vuelvo del trabajo en tren. Pero sobre todo me gusta leer tranquilamente por la tarde, al llegar a casa, para desconectar de todo.
TS: En todos los viajes. En todos los trenes. En todas las noches. 
IW: El mejor momento para leer es cuando me apetece, porque, la verdad, no siempre hay ganas de leer.
5.- Describidnos vuestro rincón de lectura.
EDR: En casa suele ser el chaise-longue del sofá, que tiene un cajón con mantas al lado y parece que te invita a pasarte la tarde leyendo hecha un durum, casi siempre con mi gato al lado, que aprovecha que no me muevo para dormir la siesta encima.
IW: Por suerte, los rincones de lectura los construimos en cualquier lugar. Son transportables, como los libros. Hay cosas que ayudan, el silencio, por ejemplo. No soy de costumbres, creo que no tengo ninguna, así que tampoco tengo un lugar para leer.
TS: Me gusta leer cerca de una ventana.
6.- ¿Nos recomendáis un libro infantil?
EDR: Para niños a partir de nueve años aconsejo a tres autores imprescindibles: Roald Dahl, Michael Ende y Joan Manuel Gisbert. De este último recomiendo Escenarios fantásticos, que se acaba de reeditar y es precioso.
IW y TS: De nuestra infancia a la infancia de nuestros hijos: El oso que no era oso, El paquete parlante, Lejos de Boneville y La Porota.


Biobibliografía'S

Microlocas es el nombre adoptado por un colectivo de cuatro escritoras para crear un proyecto literario común en el que, sin renunciar en ningún momento a la creación individual, son capaces de cuestionar el concepto de autoría, las fronteras geográficas y de la lengua, el diálogo entre poéticas diferentes. Su debut se produjo en 2011 con el libro La aldea de F., al que siguieron la micronovela Post Mortem (2014, en Piedad y deseo) y los microcuentos de Casa vacía (2015, en Wollstonecraft. Hijas del horizonte). Pelos, ilustrado por Virginia Pedrero, es su último proyecto. Microlocas son Eva Díaz Riobello, Isabel González, Teresa Serván e Isabel Wagemann.
Eva Díaz Riobello (Avilés, Asturias, 1980) es periodista y colaboradora habitual en radio. Sus textos han obtenido premios como el Jóvenes Talentos Booket o el Por favor, sea breve. Es autora del libro de cuentos Susurros en el tejado (2010), ganador del certamen Nuevos Creadores.
Teresa Serván (Madrid, 1974) es especialista en juegos de mesa. Ha publicado microficción en algunas de las más importantes antologías como Por favor, sea breve 1 y 2 (2001, 2010) o El ojo narrativo (2009) y en el 2007 obtuvo el premio Movistar para relatos hiperbreves.
Isabel Wagemann (Valdivia, Chile, 1972) es periodista y fotógrafa y, además de publicar su minificción en diferentes revistas, ha sido incluida en antologías como Por favor, sea breve 2 (2010) o Parafilias Ilustradas (2010). En 2013 obtuvo el premio chileno Santiago en 100 palabras.

lunes, 12 de junio de 2017

Hoy viene a tomar el té... Pilar López Bernués

1.- ¿Por qué te gusta leer?
Me gusta leer porque cada libro es una puerta abierta hacia infinitos lugares, nuevas experiencias y un auténtico pozo de sabiduría; hasta en el peor de los casos, siempre se aprende algo nuevo.
Y yo vivo con la imaginación. Si leo novela, entro con la mente dentro de las historias atesorando emociones, reflexiones, escenas, paisajes…, que acabo deformando a mi gusto hasta hacerlos míos y totalmente exclusivos. Muchas veces me codeo con los “protas”, los modifico, los adapto a mis perspectivas y me convierto en otro personaje más. Leer es un ejercicio muy creativo, o puede serlo si uno se lo propone. De hecho, si pudiéramos ver las mentes de las personas, apreciaríamos que hay tantas versiones de un mismo título como lectores; no existen dos iguales porque en mayor o menor medida cada uno ha creado la historia a su manera y la ha convertido en única.
Me he referido al género de novela, pero lo mismo ocurre con un ensayo, poema, libro histórico… Cualquier lectura permite desarrollar la imaginación, casi siempre desata emociones y resulta enriquecedora. En otras palabras y para no enrollarme más: Leer me permite crecer como ser humano, aprender y vivir en múltiples entornos sin necesidad de moverme de casa.

2.- ¿Recuerdas cuál fue el primer libro que leíste?
Leía mucho desde pequeña. Pero como libro con “cara y ojos” hay uno, al que le tengo mucho cariño porque me impactó hasta el punto de leerlo ininterrumpidamente unas veinte veces. Tenía entonces unos nueve o diez años. Se trata de Viaje al centro de la Tierra de Julio Verne. Como siempre me han atraído los deportes de riesgo, especialmente la escalada, la imagen de portada en la que se veían tres espeleólogos descendiendo por la chimenea de un volcán, me fascinó. Eso sí, a esa edad, las incontables referencias científicas que hay al principio de la novela me agobiaban, a pesar de que yo he sido siempre de Ciencias. Pues nada, me cansaba, cerraba el libro…, pero miraba con deseo esa ilustración de portada, ¡quería conocer la historia! Por fin, logré pasar esos primeros capítulos y ya me captó la obra, me metí de lleno en la aventura, disfruté de lo lindo… Y, como he apuntado, durante mucho tiempo volví a repetir la odisea, reviviéndola de nuevo una vez tras otra y viajando con la imaginación hacia un lugar tan fantástico como desconocido.

3.- ¿Cuál es tu libro favorito?
No tengo uno concreto. Leo mucho y muy variado, dependiendo del momento y hasta de mi estado de ánimo. Hay tantos títulos que me han gustado que no me atrevo a señalar ninguno.

4.- ¿Y tu momento favorito para leer?
Por lo general a media tarde. Pero también me gusta leer en la cama, con la nariz pegada al libro y, actualmente, en compañía de mi gato Aneto dándome la tabarra… Cuando era pequeña, me lo pasaba “pipa” esos días que no podía ir al cole porque estaba enferma; allí, arropada y recibiendo las atenciones de “mami”, me encantaba leer cuentos y tebeos, uno tras otro.

5.- Descríbenos tu rincón de lectura.
Pues es la esquina del sofá mayormente, pero también es cierto que suelo leer en el jardín, en una playa, en la consulta del médico… Pocas veces salgo de casa sin un libro.

6.- ¿Nos recomiendas un libro infantil?
No me gusta mucho recomendar libros, infantiles o no. Creo que cada lector tiene sus gustos y que muchas veces alguien no es aficionado a la lectura por la sencilla razón de que no ha encontrado un género que le atrape lo suficiente o un título que le haya captado. Pienso que ese ejercicio de elegir libro ha de ser algo muy personal. Lo que me gusta a mi no necesariamente interesará a otras personas y viceversa. Esto mismo suelo decirles a los escolares cuando doy libros-fórum. Casi con seguridad, les  gustará leer cuando descubran qué género es el suyo y no tengan que leerse algo impuesto. Sí apuntaré, tratándose de niños, que yo recomendaría lecturas que les desarrollen la imaginación, les atraigan en la primera página con algo de intriga y, muy especialmente, que les transmitan valores.


Biografía

Nací en Barcelona en 1957. Estoy casada y tengo un hijo. Estudié Bachiller superior en la rama de Ciencias y C.O.U. Luego hice algunos cursos de Informática, programación y Sistemas Operativos. He trabajado desde los dieciséis años hasta 2007, cuando la última empresa cerró por un ERE. A partir de ese momento, y puesto que no encontré trabajo, me dedico a la Literatura a tiempo completo. Escribo, colaboro con una web literaria haciendo críticas, reseñas y entrevistando a autores. También doy libros-fórum de mis libros juveniles por I.E.S. de toda España a los que me emplaza la editorial. Escribo desde los nueve años, pero no conseguí publicar hasta casi los cuarenta. Fue una novela juvenil que editó Bruño y que se ha convertido en la primera de la saga Aventureros en Acción de la que hay seis títulos publicados, algunos más en lectura y otros que me he auto-editado en e-book y papel a través de las plataformas Kiendle y Createspace de Amazón. También tengo publicadas varias novelas de diferentes géneros (no LIJ) tanto en editoriales tradicionales como autoedición, y varios relatos cortos. Escribo a diario (para mí es una necesidad imperiosa). Luego viene esa parte tediosa que los autores que lean esto entenderán muy bien: ¡Buscar editorial!

lunes, 5 de junio de 2017

Hoy viene a tomar el té... Antonio Torrejón


1.- ¿Por qué te gusta leer?
No tengo ni idea y creo que nunca me lo he planteado. Es algo que tengo tan interiorizado, desde hace tiempo, que ni siquiera lo pienso. De todas formas, si un niño me preguntase qué tiene de bueno leer (que al fin y al cabo es la misma pregunta formulada en otros términos) le diría que leyendo conoces otras vidas y, lo que es más importante aún, te conoces mejor a ti mismo. Que un buen libro tiene la capacidad de cambiarte para siempre y eso es mucho.

2.- ¿Recuerdas cuál fue el primer libro que leíste?
Tengo una memoria pésima, pero supongo que sería algo de Barco de Vapor o algo así. Recuerdo con mucho cariño un libro del colegio de la editorial Anaya, en el que el protagonista se llamaba Borja y tenía un oso de peluche llamado Pancete. Luego ya de un poco más mayor recuerdo devorar todo lo que caía en mis manos de Julio Verne, Emilio Salgari, Alejandro Dumas, Mark Twain… Todo lo que oliese a aventura. Recuerdo también los cinco y una serie alemana de unos chicos que resolvían misterios llamados PAKTO.

3.- ¿Cuál es tu libro favorito?
Esta sí que es imposible de contestar. Dependiendo del día, del momento y de mil cosas más diría un título u otro. Para no mojarme mucho, dejo diez títulos que en algún momento fueron favoritos. El guardián entre el centeno de J. D. Salinger, La senda del perdedor de Charles Bukowski, El día del Watusi de Francisco Casavella, Los detectives salvajes de Roberto Bolaño, Crematorio de Rafael Chirbes, Sonetos a Cristo de Antonio Lobo Antunes, Opiniones de un payaso de Heinrich Boll, Pedro Páramo de Juan Rulfo, Rayuela de Julio Cortázar y LA Confidencial, de James Ellroy.

4.- ¿Y tu momento favorito para leer?
Siempre he sido de lectura nocturna, pero últimamente, por la llegada a mi vida de dos terremotos en forma de hijos, mi momento favorito es el que me dejan. Es decir, no tengo muchas opciones. Así que aprovecho los ratos en los que se duermen o están jugando entretenidos

5.- Descríbenos tu rincón de lectura.
Pues siempre he sido de leer en la cama. Fue algo inculcado desde la infancia y ahí ha quedado. Cuando era pequeño, nos íbamos a la cama cada miembro de la familia con un libro. Uno de esos recuerdos indelebles que quedan en la memoria es el de estar leyendo en la cama con la luz de la mesilla encendida y cuando no entendía alguna palabra, preguntar gritando a mi padre, que estaba en su propia cama leyendo, el significado.

6.- ¿Nos recomiendas un libro infantil?
Pues no voy a ser muy original me temo, pero es que son libros que me marcaron profundamente en mi propia infancia. Y que tengo reservados en la estantería como oro en paño para cuando mis hijos crezcan. Son El principito de De Saint Exupery (el único libro del mundo que creo entienden mejor los niños que los adultos) y luego dos de Michael Ende, La historia interminable y Momo.


Biografía
 
Antonio Torrejón García (Esquivias, 1981) es licenciado en psicología por la Universidad Autónoma de Madrid. En 2010 consiguió el primer premio en la categoría de relato del Certamen de Jóvenes Artistas de Castilla la Mancha con un relato titulado «En los límites de la ficción». En 2011 participa en la antología «Boxing Day» (Ed. LCK15) con el relato “La cuenta atrás”. Publica su primera novela «Terciopelo en las alcantarillas» en 2012 en la Editorial Atlantis. En 2013 consigue un accésit en el XXX Concurso de cuentos Gabriel Aresti, uno de los más prestigiosos de España, con el relato «Síndrome vacacional». En 2016 publica su segunda novela «Los chicos duros sólo bailan cuando nadie mira» en la Editorial Playa de Ákaba. En la actualidad, sigue residiendo en su Esquivias natal bajo la influencia de Cervantes e intenta robarle horas a los días para seguir escribiendo mientras sus hijos Noa y Martín le trepan por las piernas.