Hoy viene a tomar el té... Carmen Sánchez Espinosa

1.- ¿Por qué te gusta leer?

 Porque me permite volar.

2.- ¿Recuerdas cuál fue el primer libro que leíste?

 No. No existe en mi memoria “un primer libro”. Mi casa, nunca se lo agradeceré suficiente a mis padres y a mi hermano mayor, estaba llena de libros. Recuerdo que aprendí a leer con los comics de mi hermano y también recuerdo los libros de Verne y algunos best-sellers que tenían mis padres por allí y que leí demasiado pronto y a escondidas como “El Padrino”, de Puzo o “Viven”, sobre la tragedia de los Andes. Éste en concreto lo recuerdo porque mi madre se alteró mucho al verme con él. Claro, indagaba hasta dónde había leído. Y es que me gustaban mucho los libros de mayores, no me iban los cuentos infantiles.

3.- ¿Cuál es tu libro favorito?

No podría escoger uno. Voy a decirte algunos por lo que han representado para mí, como catarsis, te diría “El amor en los tiempos del cólera” de García Márquez, “Ensayo sobre la Ceguera” de Saramago, “The Road”, de Mccarthy, “El guardián entre el centeno”, de Salinger,  “A Sangre fría” de Truman Capote, “Matar a un ruiseñor”, de Harper Lee, “París era una fiesta”, de Hemingway o “Drácula” de Bram Stoker.

4.- ¿Y tu momento favorito para leer?

En tiempos de trabajo, me gusta leer por la noche. Pero en verano, las siestas son el momento propicio para devorar libros.

5.- Descríbenos tu rincón de lectura.

En la cama, justo antes de dormir. En mi mesilla siempre tengo varios ejemplares que leo a la vez, dependiendo de cómo me encuentre o mi estado de ánimo. Y en la buhardilla, donde tengo una gran biblioteca pero muy anárquica, con libros hasta por el suelo.

6.- ¿Nos recomiendas un libro infantil?

Cualquiera de los de Julio Verne. No soy muy de edades recomendadas, a veces el niño tiene mucha curiosidad por libros que no son propiamente los cuentos infantiles y te ves “adaptando” libros de Verne u otros clásicos mientras le lees, pero creo que la lectura debe adaptarse al niño y no al revés. Ahora estoy leyendo con mi hijo justo “Las aventuras de Tom Sawyer”, y también clásicos españoles en versión infantil. Y hay una editorial, El Barco de Vapor, que tiene una colección preciosa para niños pequeños,  “La Casa mágica del árbol”. Aprenden mucho a la vez que se divierten en cada aventura.

Biografía:

Difícil hablar de una misma. Empiezo un poco por la bio más formal. Estudié Derecho en la Universidad de Alcalá de Henares. Cuando terminé la carrera me apunté al Turno de Oficio y estuve trabajando en casos penales y civiles durante 6 años. Ahí tuve un contacto muy directo con la “otra realidad”, la de los perdedores, gente que había caído en la marginalidad y en robos por la droga. También trabajé en un despacho jurídico y compaginé estos trabajos siendo activista en organizaciones no gubernamentales, como Amnistía Internacional, en el equipo de refugiados, y prácticas jurídicas en Cruz Roja, en el asesoramiento a solicitantes de asilo.

Posteriormente he trabajado en multinacionales, los últimos como responsable, en departamentos de asesoramiento jurídico, reclamaciones, y lucha anti-fraude. En los últimos tiempos mi vida profesional ha quedado relegada a un segundo plano por temas personales, siendo una época valle que he aprovechado para profundizar en áreas de Comunicación digital y realizando proyectos en gestión de contenidos web, especialmente jurídicos.A nivel creativo, gestiono un blog en wordpress, llamado “El Puzzle de Vienna Guitar”, en el que hago un guiño a dos películas fundamentales para mí, Johnny Guitar y The rain people (el segundo título del blog). Como su nombre indica es un puzzle en el que igual cuelgo relatos que hago críticas muy personales sobre películas, series o libros, que hablo de hechos cotidianos pero visto bajo un cristal microscópico y muy personal.

Hasta aquí la bio formal, ésta, del blog, me define mejor, creo.

“ No sabría cómo definirme. Porque definirse a uno mismo no es contar lo que uno hace o su profesión. Si fuera ésto, sería fácil. Soy abogada y he trabajado en entornos multinacionales, también por cuenta propia. Soy mamá. Y escribo. Escribo. Me apasiona el cine, la literatura, viajar y las series de televisión americanas de la HBO. Pero más que definirme a mí, se trata de definir “El puzzle…”. Este rincón surge del caos, de la dispersión y de nadar contracorriente. Intuyo ya que no se trata de llegar a la otra orilla, ésa a la que no va nadie, sino que se trata sólo de nadar”

Y sí, escribo, lo hago desde que era una niña. Ganaba premios en el colegio y cosas así, pero siempre ha sido una afición. Salvo el blog en el que cuelgo algunos relatos o la publicación de algunos escritos en Antologías, escribo fundamentalmente para mí, como una forma, la mejor, de liberación. Nunca me he atrevido a enviar nada a ninguna editorial siquiera, supongo que más que publicar lo que te hace escritor (bueno, malo o regular) es creerse escritor, y eso es lo difícil. Aunque quizá lo intente, nunca es tarde, supongo. Pero al menos creo esto que he escrito a lo largo de mi vida es un regalo interesante para Leo, mi hijo, un crío muy fantasioso al que le encanta crear historias. Y en eso estamos.